Lunes, 14 de Junio de 2010 02:00 |
El pasado 6 de junio la policía federal, apoyada por elementos de la policía estatal de Sonora y la municipal de Cananea, irrumpió en las instalaciones de la mina propiedad del Grupo México (GM), para terminar violentamente con una huelga que, de haberse mantenido, el próximo 30 de julio cumpliría tres años de duración. Además este contexto fue aprovechado por el gobierno para, con el apoyo de la policía del estado de Coahuila, retomar las instalaciones de la mina 8 de Pasta de Conchos, cerrada desde la tragedia de febrero del 2006 en la que murieron varios mineros presas de un derrumbe, para devolvérsela también al GM. |